La creatividad forma parte de nuestro ADN, absolutamente todos la tenemos aunque por ser una capacidad humana, unos la estés desarrollando y otros simplemente la tienen dormida.
Esta capacidad creativa que tiene nuestro cerebro nos permite llegar a nuevas conclusiones, dar solución a problemas de una forma original, generar nuevas ideas o conceptos y producir cosas innovadoras y de valor.
La actividad creativa es entonces la mejor opción para emprender un proyecto con éxito, por lo que a continuación les describimos los 9 pasos que pueden seguir para madurar la idea y convertirla en un sistema de propuesta de valor.
Background & entorno: Identifiquen las capacidades que cada uno tiene y los recursos a nivel personal y de entorno que les puede ayudar a definir mejor la idea.
Proceso Creativo: Activa tu creatividad para cambiar la forma habitual de ver y hacer las cosas. Pensando de forma diferente podrás ver nuevas soluciones.
Reto Creativo: Haz una definición del reto sobre el que vas a realizar el proceso creativo (con el que deberás generar tu idea).
Generación de Oportunidades: Crea oportunidades a través de la identificación de los conceptos que componen tu reto.
Analogías en otros mundos: Busca en otros mundos para que rompas el pensamiento lógico y explora nuevas rutas.
Valorización de las ideas: realiza listas, clasifica y selecciona las mejores ideas creadas en el proceso. Asigna puntos y prioriza aquellas ideas que son más relevantes para tu problema.
Desarrollo de las ideas: Desarrolla las mejores ideas para convertirlas en propuestas valiosas que se puedan concretar en un modelo real de producto / servicio.
Prototipado & Testing: Comprueba que tu percepción coincida con la realidad del mercado mediante una simulación del concepto que haz creado.
Propuesta de valor: Describe la propuesta final que has desarrollado y detalla los aspectos que la componen.
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